Los problemas económicos e institucionales se agravan en un club que ya descendió el pasado verano a Tercera División por impagos y que tiene a sus propietarios lejos de Castellón, la empresa Castellnou 2005 SL, gestionada por el representante de futbolistas José Manuel García Osuna y Antonio Blasco.
Además, el sub-apoderado de la entidad castellonense, Fernando Miralles, tiene previsto abandonar la próxima semana el club.
La crisis que atraviesa el Castellón afecta a trabajadores y jugadores, que se encuentran sin cobrar las últimas dos mensualidades y con promesas de pago incumplidas, lo que ha llevado a la plantilla a protestar por faltar a estos compromisos adquiridos.
Además, hay jugadores que la pasada temporada ya se encontraban en el club a los que se les adeuda hasta doce nóminas, los mismos que a otros trabajadores del club.
En esta situación se encuentra el defensa Marc Trilles, que ha denunciado que en su caso se le deben doce mensualidades y ha declarado que puede "vivir gracias a que estoy en el pueblo con mis padres".
Los jugadores tienen previsto emitir un comunicado de prensa para denunciar la situación y también han advertido que en caso de que hoy no cobren tienen previstas medidas de presión. "A partir de mañana cogeremos el toro por los cuernos", ha agregado Marc Trilles.
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